Por Xabier Arrizabalo Montoro
Relaciones entre las clases sociales para llevar a cabo el proceso de producción de los medios de vida de la sociedad. Estas relaciones dependen a su vez de los vínculos que cada clase tenga con los medios de producción, en particular de su apropiación o no, lo que revela el lugar central que tiene en toda sociedad la forma de propiedad.
Por ejemplo, las relaciones de producción capitalistas consisten en la mercantilización de la fuerza de trabajo, a partir de la existencia de quienes son propietarios de medios de producción (capitalistas) que necesitan comprar fuerza de trabajo para producir y de quienes no son propietarios (proletariado), obligados por tanto a vender su capacidad de trabajar. Esta relación no es entre iguales, sino que los capitalistas sólo pagan a los trabajadores el equivalente a una parte de su trabajo, apropiándose de la otra como ganancia, lo que define a esta relación como explotación (debido al trabajo no pagado que es la única fuente de la ganancia de la clase capitalista). Por tanto, la fórmula libertad de mercado alude en realidad a libertad de explotación (véase el Discurso sobre el libre comercio de 1848 de Marx).
Si bien no pueden darse unas determinadas relaciones de producción sin un cierto grado de desarrollo de las fuerzas productivas, también las relaciones de producción influyen sobre las fuerzas productivas (véase al respecto la breve Carta a Bloch de Engels, de 1890).